· Disfruta la página y los relatos. Cada ciertos dias voy subiendo más microcuentos y poemas.
· El objetivo de la web es almacenar mis escritos para luego publicar un libro donde se encuentren estos. Hablale a tus amigos de la web :)
Oziel Rodmon
Hola. Mi nombre es Oscar Rodríguez Montoya, aunque escribo bajo el seudónimo de Oziel, por su significado ("Que tiene fuerza Divina").
Tengo 16 años y vivo en Concepción, Chile.
Me gusta mucho leer y escribir (en computador, a mano... no), no me considero un escritor, pero me gusta lo que escribo, lo que me gusta, lo publico acá.
Mi vida, creo, ha sido normal, y lo que escribo no representa mi realidad, más que una crítica a la vida, vean mis textos como algo de ficción.
El significado de cada uno de los textos es más profundo que una simple crítica, tiene que ver con la mente, con el desarrollo del espíritu y el equilibrio.
Utilizo el alias Oziel, porque creo que me ayuda a tener un poco mas de confianza en mi, y a escribir mas tranquilo.
¡Espero que les guste lo que escribo y volver a verlos por acá!
Estas viendo oziel2.tk Durmiendo entre letras.
Disfruta la página y los relatos. Hablale a tus amigos de la web. :)
Noticias aqui:
- 01/02/2011 Añadí algunas canciones a algunos textos, para ambientar mejor la lectura, y ayudar a la imaginación.
Para reproducir, basta con hacer clic en el Play y esperar, si no carga simplemente seguir esperando...
Publicado el jueves, 10 de febrero de 2011 @ 17:40 | Ir al inicio
Memorias de un Puente en agonía
"El Puente de Londres caerá... caerá... caerá..." El dia era igual que siempre, el sol brindaba su calor al mundo, y el agua tenía el mismo sabor a vida. Las flores despertaban para saludar el cielo, los perros corrían en los jardínes cultivando su alegría. Pero mis energías ahora se estaban enfriando. Mis sueños aún estaban allí, junto a mis metas, esperando pronto encontrarse con mis logros. Pero algo era distinto. Las bases en mi vida tenían algo extraño. Talvez crecí demasiado para ellas, algo había, que yo no sabía. El mundo seguía girando, pero por un momento sentí que todo comenzaba a detenerse. Traté de buscar una explicación, y comenzé por analizar el principio del mundo. Personas ayudando, destruyendo, creando, naciendo, asesinando, colaborando, robando. Rebeliones, honestidad, Fé, culturas, resistencia, bondad, pasión, poder... Seguía pensando en el todo, pero seguía terminando en la nada. El big bang, big crunch. Siempre supe que el puente caería algún día, no pensé que sería mi propio puente... Analizé entonces mis bases, pero mis bases, estaban mucho peor que yo. Ya habían analizado, mucho antes, lo que yo ahora analizaba. Y comprendí que no podrían sostenerme más...
"El puente de londres está cayendo... está cayendo... está cayendo..."
Y si no me sostienen ellos, ¿me sostendré sólo? Mis energías estaban frías ya. Por completo. No me sentía capaz de lograrlo, necesitaba unas bases mas fuertes que yo, para seguir creciendo. Pero aquello era imposible, es algo que debo hacer sólo. Las huellas estan marcadas, ahora solo debo buscar por dónde continuar. Si mi pasado perdió, no podré seguir con el presente, y mucho menos con el futuro... Creo que el puente ya está cayendo, y no me di cuenta, o no quise darme cuenta.
Simplemente cerraré los ojos... me dejaré caer... y esperaré la orden de...
Publicado el martes, 1 de febrero de 2011 @ 14:04 | Ir al inicio
No podré estar cuando partas
Hoy me decidí, y lamento decirte que no podré estar allí cuando partas. Me acerqué a mi madre y quise saber su opinión acerca de ti. Con gran dolor en su corazón, me contó sobre aquello que callaste y mis sueños cayeron hasta lo más profundo del infierno y aún se queman allí. Tu silencio... maldito silencio... No podré estar cuando partas. Pues tengo asuntos pendientes para calmar mi dolor. Quiero marcar en mi alma mi esfuerzo, todo lo que probé, todo el trabajo que hice por ayudarte cuando estuviste en lo más bajo del mundo. Quiero que las personas me recuerden por lo bueno que fui ayudando a los demás y mostrando el lado puro de la vida. No quiero que me vean como ahora, destruído y con la moral convertida en polvo. No podré estar cuando partas. Debo visitar, también, el árbol que acogió nuestras sonrisas y nuestros momentos de euforia. El mismo árbol que abracé cuando golpeabas mi corazón diciendome que te estorbaba. Debo regar ese árbol, debo darle de beber mis lágrimas, para que pueda comprenderme esta vez, pues es imposible saber lo que siento si no se es parte de mi. Mis lágrimas abordaran sus raíces y estremecerán sus ramas, vagando finalmente en sus hojas, que caerán a mi cabeza para sanar mi dolor. No podré estar cuando partas. Debo ir a visitar por última vez a tu tía enferma, fingir lo mejor posible una sonrisa y brindarle esperanzas para un nuevo día. Espero que disfrutes tu nueva vida lejos de mi y lejos de aquí. Espero que algún dia entiendas lo que ocurre, y te arrepientas, para encontrarnos en el lugar al que partiré yo... Oziel.-